Tlalpujahua, el pueblo de la eterna navidad.

Tlalpujahua, el pueblo de la eterna navidad.

Tlalpujahua es sin duda un sitio lleno de arquitectura, gastronomía, historia y atractivos para visitar con la familia. Ubicado en un tramo intermedio entre la preciosa ciudad de Morelia y la impresionante Ciudad de México, a las puertas del estado de Michoacán, nos encontramos con la población, una localidad que es sinónimo de artesanía en todo el país, donde el sentimiento navideño se perpetúa más allá del mes de diciembre haciéndose notar durante todo el año. Tlalpujahua es un pueblo artesano desde hace más de 50 años, destacado sobre todo por su gran producción de esferas navideñas. Gracias a Joaquín Muñoz, quien después de haber regresado de Estados Unidos -donde descubrió el proceso de elaboración de aquellas piezas que alegran la Navidad- enseñó el oficio a su familia y a varias personas más de su comunidad. Fue tanto el ahínco de la comunidad, que básicamente la economía de la mayoría de los habitantes depende de la producción de esferas artesanales. Según datos de 2019, esta actividad emplea a más de 1,600 personas. Por eso, es importante que tu espíritu navideño no se apague a pesar de la pasada crisis sanitaria y de que prevalezca el modo ‘consume local’ y, si se siente seguro, anímese a ir, con las debidas precauciones, a la Feria de la Esfera de Tlalpujahua. Este sitio está a tan solo tres horas de Ciudad de México y a cuatro de Guadalajara, en Michoacán, que ha recibido el sobrenombre de ‘el pueblo de la eterna Navidad’ por su actividad artesanal que es continua casi todo el año. De hecho, es uno de los principales productos de esferas a nivel mundial. Año con año, durante la Feria de la Esfera, los artesanos de todo el estado de Michoacán exponen y venden sus trabajos originales y hechos a mano a los visitantes. Es la tierra natal de los hermanos López Rayón ? de quienes procede el apellido de la población -, unas de las figuras más destacadas del movimiento de independencia mexicano, Tlalpujahua se reconvirtió económicamente gracias a un emigrante que se impregnó en Chicago de la industria ligada a los elementos navideños. A su regreso, Joaquín Muñoz Orta creó junto a su esposa un taller de esferas de Navidad que fue creciendo con los años. Su saber hacer artesanal fue transmitiéndose a otras personas de la comunidad hasta crear una actividad pujante en el municipio que emplea a más de 1500 personas actualmente.  Tras más de cincuenta años de tradición y convertida en uno de los mayores centros mundiales de producción de bolas de Navidad, Tlalpujahua conserva en sus talleres la manera tradicional de fabricación tanto en el soplado del vidrio como en la decoración. La enorme producción, mantenida durante todo el año y el gran porcentaje de población que se dedica a esta actividad, hacen que la Navidad sea omnipresente en cualquier mes del calendario, siendo un motivo de orgullo de sus habitantes. El punto álgido se alcanza entre los meses de octubre y diciembre, con la celebración de la Feria de la Esfera. Un largo evento que tiene como epicentro el Palacio Municipal y las calles de la villa, donde cientos de artesanos exponen sus diseños e inundan la población de adornos navideños hechos a mano, con focos y esferas, como absolutos protagonistas. Tlalpajahua es uno de los Pueblos Mágicos de México desde 2005 Tlalpujahua no solo es «el pueblo de la eterna Navidad». Sus vetustas calles empedradas, su arquitectura virreinal, sus hermosas panorámicas entre cerros, su colorido, su historia y su rica y variada artesanía de plumajes, cerámicas, obras de cantería y popotillo , -arte realizado a través de fibras naturales-, junto con los ya citados adornos navideños, han hecho que sea nombrado como uno de los sitios obligados para el turismo visitar en nuestro país.