Seguidores

viernes, 11 de enero de 2008

POEMAS DE ENRIQUE CERVANTES

Y NUNCA ME HICISTE LA PREGUNTA...

Pues no,
Tú no te atreves,
Y yo me atrevo,
Y la vida transcurre
Tan lenta,
Y es ese el transcurrir
De nuestros días,
Como una reiterada
Pregunta,
Como una permanente
Duda,
Sobre quien va a salir
La primera insinuación,
La primera palabra,
Y que era de la vida
Nuestra,
Antes de que la tuviéramos,
Antes de que la compartiéramos,
Pero claro,
Mientras tanto,
Cada quien esta haciendo
Lo suyo,
Haciendo suyo su mundo,
Recorriéndolo,
Laborándolo,
Y a cada inicio de día
Nos surge
Como siempre
Esa misma duda,
Esa misma pregunta,
¿Cuándo nuestros inciertos
Pasos nos llevaran
Invariablemente
El uno hacia el otro?
Pero entre tanto,
Que le vamos a hacer,
Me quieres a tu estilo,
Te quiero a mi modo,
Aunque ni tú ni yo
Nos toquemos siquiera
Ni con la mirada,
Continuando ambos
Displicentemente,
Como si nada.


VOLUBLE ANDANTE

Tu marchando,
Siempre emigrando,
Recomponiendo sola tu
Camino.
Aun sobre la marcha,
Dando siempre como
Hechos,
Cada una de tus palabras,
Mencionando todas tus
Mentiras,
Como si fueran verdades,
O sí acaso medias verdades.
Haciendo siempre lo que
Quieres,
Con quien quieres,
Cuando quieres,
Obsesiva, impulsiva y desatada,
Intentando,
pretendiendo poder amar,
revelando todos tus pecados,
Y escondiendo todas tus virtudes.
Porque tu cautivas,
Enfrentas y contienes,
Como una especie de magia,
Hechizo o encanto,
Como una mujer altiva,
Vanidosa y orgullosa,
Pero tambien radiante,
Brillante y deslumbrante,
Quisiera fueras cual muñeca
De trapo,
Para primero recogerte,
Y enseguida tirarte,
Para luego clavarte,
Y después enterrarte,
Asi,
De una manera
Absoluta, decidida y
Descarada.


VIAJERA

Ella, sosteniendo entre
Sus manos,
Arduos futuros vacilantes,
Como su todo fuera un
Continuo superar de pruebas,
Escalando ahí perdida,
Las cumbres del sentimiento
Y de la razón,
Confirmando Asi el incendio
Y la ceguera que conlleva la
Pasión,
Desdibujando, desgranando y
Resquebrajando los momentos,
Pero manteniendo como siempre
“el permanente estado de las cosas”
adivinando o suponiendo la llegada
de otros tiempos,
aguardando un repentino cambio
de suerte,
como si fuera algo que ya tuviera
contemplado,
donde no todos los caminos
van a dar a la misma roma,
y en tanto el viaje continua...
-Y no termina nunca-
lo tuyo a final de cuentas fue...
¿Evasión, o peregrinaje?

TÚ NO

Contigo acabo mi devoción,
Termino mi fe,
Desapareció todo fervor,
Mientras tu:
Como una continua repulsa,
Como una persistente negativa,
Que tan solo en ti hallaba:
Un rostro álgido y
Una mirada gélida,
La frigidez de unas piernas
Y la ateridad de unos brazos,
El frío de tu piel y
La heladez de tu cuerpo,
Y yo ansiando:
Despertare, levantarte,
Para:
Poseerte y habitarte,
Y así:
Llenarte y desbordarte,
Con un amor:
Ardiente, candente y abrazador,
Ofreciéndote:
Intensidad, fortaleza y reciedumbre,
Y entre tanto tu:
Impotente, consumida y agotada,
Y yo entregándote mi inocencia
Y tu regalándome tu culpa,
Escenificando así invariablemente
Nuestro eterno contraste,
Como un encuentro y desencuentro
Constante,
Claudicando juntos irremediablemente,
Mientras la vida después de esto,
Ya nos sabe a nada,
Y tu encerrandote en ti misma
Como siempre,
Manteniéndome definitivamente
Cautivo, y atrapado,
Con tu no, que significa nunca,
Con tu no inevitable,
Que me cubre y que me envuelve,
Con tu no marcado,
Tan contundente e inapelable,
Como un jamas reconstruido,
Tan único y solitario,
Reconvirtiendo así contigo,
Todo mi futuro hacia tu pasado.

TAN SOLO SEREMOS OLVIDO...

Tu, yo, los dos, los unos,
Ambos, juntos y unidos,
Tan solo seremos olvido...
Una corazonada al azar,
Un encuentro casual y
Un deseo antojadizo.
Tan solo seremos olvido...
Un cariño transitorio,
Una impulso simulado y
Un amor incumplido.
Tan solo seremos olvido...
Un cuerpo disfrazado,
Un rostro enmascarado y
Una fidelidad inadvertida.
Tan solo seremos olvido...
Una voz apagada,
Una mirada esquiva y
Una caricia reprimida.
Tan solo seremos olvido...
Un recuerdo banal,
Un sueño pasajero y
Una promesa deprimida.
Tan solo seremos olvido...
Una imagen trucada,
Una vida voluble y
Un destino fingido.
Tan solo seremos olvido...
En un futuro, pasado y presente,
Desde ahora, mañana y siempre.
Tan solo seremos olvido...
Tan
Solo
Seremos
Olvido…


SOBREVIVIENDO

En ti mujer,
La belleza se confirma
Y se regodea,
Cuando vas adquiriendo
Lentamente,
La forma total de mis
Sueños,
Despertando en mi
Interior,
Una pasión con fuego,
Y yo,
Que tan solo soy el reflejo,
De las necesidades que
Surgen de tu exterior,
Y tu,
Como la mujer,
Tentadora e inquietante,
Que me has aprendido,
Tan profundamente,
Con todo ese amor.

SIN RECUERDO, NI OLVIDO

Y aquí me encuentro ya
Entre tu bondad y maldad,
Si, donde parece que
He perdido lo ganado
Y ganado lo perdido,
Entre tu débil presencia
Y tu fuerte ausencia,
Mientras tratas de absolverme
O castigarme con el peso de tu
Amor,
Pues cuantos bienes me diste y
Cuantos males me hiciste,
¿Porque a mi lado vuelves y
Después té mudas?
Para de repente encontrarnos
Inmersos en un universo de
Placer y dolor,
Donde tu callas lo que sientes
Y yo temo lo que digas,
Pues entre ese amar y temer
Se nos va la vida,
Donde tu representas el bien
Que me falta y el mal que
Me sobra,
Porque ni a ti ni a mí nos
Falta ni nos sobra este querer,
Donde deberíamos responder y
No esconder todo lo que llevamos
Dentro,
combinando así entre ambos
Placeres y antojos,
Prefiriendo entender y no
Contender el uno con el otro,
Será por ello que acaso ya no
Te recuerdo,
Pero ni siquiera te olvido.


SHE DANCES (IN THE TABLE)

Una luz que se apaga,
Y aparece de pronto ella
En el escenario,
¿soy yo solamente quien la
Observa?
Pues no, ahí están los demás,
Los otros,
Como una multitud enardecida,
Y ahí destila su presencia,
Su figura, su belleza,
Donde ella es armonía y
Movimiento,
Si ella, ahí rendida y
Entregándose,
Sin condiciones,
Ni imposiciones,
Hermosa, bella y desafiante,
Ella ahí, tan perversa y perfecta,
Si, donde es ella la redentora
De todos mis pecados,
Aparentemente frágil,
Pero dura,
Tan a la mano,
Como inalcanzable,
Tan liberada,
Pero limitante,
Tan inconsciente de su hermosura,
Como inquietante,
Y yo sin querer rendirme,
Mirándote, anhelándote,
Perdiéndome en ese infinito cielo,
Tan solo lleno de buenas intenciones,
¿Cómo podrían ya separarnos?
Ella ahí en su capricho,
Y yo ahí en mi emoción,
Ella ahí en pleno éxtasis,
Y yo ahí por una necesidad,
Ella bailando y corriendo,
Corriendo sola contra el tiempo,
Pero alcanzando su futuro,
En ese cadencioso y frenético
Baile,
Así sé simple y entendible,
Como son sus movimientos y
Contoneos,
Donde eres tú lo único que yo
Debo recordar esa misma noche,
Ven y tómame ya,
Mi posesa,
Elévame, cúbreme y tiéndeme,
Finalmente mostrándome
Todos tus encantos,
Mientras voy como un condenado
Que voluntariamente acepta su
Castigo,
Como quien cegado por su fe,
Va en busca de su absoluta
salvación o Perdición,
Sí, mi dulcinea,
Soy como un quijote,
Que consciente de su locura,
La moldea y juega con ella,
Hasta encontrarle a la vida
Un sentido,
Para así volver a encontrar
El paraíso perdido,
Pues con nadie mas podría
Yo hacerlo,
Sintiéndome a la vez tan
Extraviado y confundido,
Totalmente sobrio,
Pero borracho por ti,
Donde yo quisiera poder hablarte,
Sin saber exactamente que decirte,
Mientras sigo sentado en esta
Solitaria mesa,
Sin poder adivinar,
Sin saber realmente tu quien eres.


SUEÑO DE LAS DOCE

Amanece,
Despunta el alba,
Y tú te fugas,
Te desapareces.
Y en que lugar
De mi mente
Permaneces,
Si no es entre los
Recuerdos,
Entre los efímeros
Y fugaces sueños.
Cuando aun estas
Dentro de mí,
Pero yo ya no estoy
Contigo.
Que tan solo se halla
Presente,
La inmensidad de tu
Ausencia.
Cuando ya no puedo
Palparte ni tocarte,
Que ni siquiera puedo
Llamarte o buscarte,
Como un angustioso
Grito en medio del
Silencio,
Que se pierde por él
Infinito,
Y nunca halla morada.
Hasta que sea otra vez
Noche,
Entre la obscuridad,
Y la penumbra,
Cuando quizá de nuevo
Me reúna contigo,
En el caprichoso e
Infructuoso intento,
De volver a soñar...
¡Contigo!


SEXO POR CONVENIENCIA

Pues sí, lo único que tu y yo
Obteníamos, era sexo,
Si, era mejor así,
¿Para que involucrar mas?
¿Para que meter al sentimiento?
Mejor utilizar a la razón,
Sin formalismos o papeles,
Sin ritos no ceremonias,
Sin determinar necesariamente
Nada,
Sin anteponer de antemano
Alguna posición o nombre,
Sin acordar fechas concretas,
Sin imponer días y horarios,
Sin inmiscuir falsas promesas,
Basados en el no compromiso,
Con un “te quiero” a veces,
Con un a veces “te amo”,
Pues:
A veces siento que te quiero,
A veces siento que te amo,
En ocasiones siento que te necesito,
Y estar amándote
Pero decir queriéndote,
Sin confundir innecesariamente
Al corazón,
Sin intentar ningún tipo de atadura,
Cuando al fin ha llegado
El aquí, y ahora,
Cuando ha llegado el momento
De la posesión y la entrega,
Sin disfrazar la pasión
Ni idealizar el deseo,
Sin lastimar mas allá de esto
Nuestras vidas,
Sin importunar nuestros destinos,
Asi, como si estuviéramos jugando,
Satisfaciéndonos el uno al otro
En ese momento preciso,
Para atender única y exclusivamente
Nuestras mutuas necesidades,
Sin pretender ni esperar nada a cambio,
Sin concebir alguna efímera esperanza,
Y una vez pasado el momento,
Cada uno poder continuar,
Y vivir de nuevo su vida, como si nada,
Hasta la siguiente vez,
Hasta la próxima oportunidad,
Hasta que uno u otro
Irremediablemente llame
Otra vez.


SEPTIEMBRE

Y Asi pasa septiembre...
El mes más triste,
Para todos, para algunos,
Para mí, tan solo para mí.

Septiembre, sí septiembre,
Es el mes más triste,
Pues me duele su recuerdo
Al despertar.

Sí, septiembre siempre,
Es el mes más triste,
Donde yo solo observo
El hueco que dejaste en mi
Corazón.

Septiembre, triste septiembre,
Eres como una fiebre mortal
Y obscura,
Con días tus tan cortos y noches
Tan largas.

Septiembre, doloroso septiembre,
Mes que me va borrando
Y a la distancia sepultando,
Cubriéndome de amargura.

Septiembre, inevitable septiembre,
Mes que pintan en mi piel el color
De la melancolía,
Como asimismo el anhelo de algún
Día poderte olvidar.

Septiembre, inolvidable septiembre,
Tratando siempre de esquivarte,
Perdiendo casi la razón,
Mi mes primero, mi ultimo y mi todo,
Pues ahí sigue de nuevo la herida.

Septiembre, eterno septiembre,
Mes donde más frío cala el aire,
Mientras mi fuego lentamente sé
Apaga,
Mes noveno que da cuenta de la agónica
Y trágica muerte de un amor.


PROFANA

Mi querida profana,
Mi amada nocturna,
Nunca fue fácil coincidir
Contigo,
Oscuramente conocerte,
Para después confrontarte,
Pues algunas veces eras tan
Falaz, superflua y vana,
Como otras veces eras tan
Etérea, diáfana e impoluta,
Una diosa profana,
Una mujer obscena,
Continuamente
Rompiendo promesas y
Quebrantando juramentos,
Para que ante tu sólida imagen
Yo me ampare y te venere,
Pues tu encabezas mis pasiones
Y abanderas mis deseos,
Apoderándote de mi voluntad
Y apropiándote de mis sentidos,
Diseñando a la razón y
Desatando a los sentidos,
Tu, tan repentinamente tierna
Y descaradamente osada,
Entremezclando
Carnalidad e inocencia,
Sencillamente certera,
Alterándolo todo alrededor,
Encontrándole a todo un
Sentido,
Pues todo lo arrasas tu,
Todo lo arrastras,
Dejando siempre rastros,
Dejando símbolos y huellas,
En interminables noches
Que te agotas y te entregas,
Sin titubear ni vacilar,
En una forma decidida y
Absoluta,
Pero debajo de estas ropas...
¿Me muestras todo lo que hay?
Cuando me encuentro sin
Pensar cautivo,
Mientras habito en tu piel
Y me cobijo en tu cuerpo.
Dilucidando armoniosamente,
Entre la suavidad de tu piel
Y la firmeza de tu cuerpo,


POESIA

Por ti,
Mis palabras marchan fugitivas,
Mis palabras fluyen virulentas,
Y marchan solitarias,
En una lenta procesión,
Para rozarte,
Para acariciarte,
Y así buscarte,
Aprenderte y afianzarse,
Delicadamente sobre ti,
Mas allá de la razones,
Más allá de los motivos,
Reinventando su presente y
Delineando su destino,
Más allá de la virtudes,
Más allá de los sentidos,
Emprendido así
­-cautivas-
Un efímero y glorioso
Camino sin retorno,
Para irremediablemente
Perderse...
¡Por el infinito!


PERENNE ROCIO

Incontenible surges de pronto
En la frialdad de la noche,
E imperceptiblemente certera
Te concentras,
Que ligera y armónica
Viajas por el aire,
Brillas, resplandeces,
Y sobre la atmósfera té
Esparces,
Soltando menudas gotas
Amorosas,
Las cuales llegan indelebles
A mi corazón,
Como una lluvia inigualable,
Pequeña y corta,
Integral, única e
Infaltable,
Vertiéndote, liberándote,
Sobre mi cálido cuerpo
Te repartes,
Humedeciendo uno a uno
Mis sentidos,
Cubriendo hasta él ultimo
Rincón de mi piel,
Conjugándote con mi verbo
Y con mi carne,
Y como una brizna generosa
Te compartes,
Diseminándote por todas partes,
Separándote de tu esencia,
Diafana, clara y transparente,
Haciéndote infinita e infaltable,
Extendiéndote delicada y
Frágil por el mundo,
Llenándolo así todo,
Absolutamente todo,
Y suave, dulce y espontanea
Te derramas,
Cayendo genuina, precisa y
Sincera,
Hasta mojarme con tu líquido
Vital e imprescindible,
Con tu eterna agua con caudal,
Tan generosa,
Esa misma que se expele
De tu boca hasta mi boca,
Que parte de tus labios a mis
Labios,
Tocándome, besándome,
Tú, la incontenible,
La irrepetible e irremplazable,
Y como cada día y como cada noche,
Completándome,
Acariciándome, amándome.


NOCTURNOS

Oscurece,
Declina el día,
Se consume,
Se apaga,
Y la noche avanza
Inexorable,
Inexpugnable,
Imperceptible,
Y se va conformando
A la medida de nuestros
Deseos,
Y la luna llena
Enciende el calor
De nuestros pálidos
Cuerpos,
Pieles que yacen
Inertes a la espera
De la conflagración,
De rito, del sacrificio,
En la entrega precisa
De la sagrada ofrenda,
En la nocturna gravedad
Que armoniza nuestros
Cuerpos,
Tocando la obscuridad,
Rozando la penumbra,
Y conquistando la
Noche,
Recorriendo, conociendo
Y abarcado la suavidad
De una piel,
Que en la vigilia ha
Estado aguardando,
Regodeando a las pasiones
Y regateando al corazón,
Intentando sentir amor,
O cuando menos
Percibirlo o
Recordarlo.


NOCTURNOS

Oscurece,
Declina el día,
Se consume,
Se apaga,
Y la noche avanza
Inexorable,
Inexpugnable,
Imperceptible,
Y se va conformando
A la medida de nuestros
Deseos,
Y la luna llena
Enciende el calor
De nuestros pálidos
Cuerpos,
Pieles que yacen
Inertes a la espera
De la conflagración,
De rito, del sacrificio,
En la entrega precisa
De la sagrada ofrenda,
En la nocturna gravedad
Que armoniza nuestros
Cuerpos,
Tocando la obscuridad,
Rozando la penumbra,
Y conquistando la
Noche,
Recorriendo, conociendo
Y abarcado la suavidad
De una piel,
Que en la vigilia ha
Estado aguardando,
Regodeando a las pasiones
Y regateando al corazón,
Intentando sentir amor,
O cuando menos
Percibirlo o
Recordarlo.


MEMORIAS

Somos:
Un encuentro,
Un espacio y un tiempo,
Una casualidad momentánea,
Oportuna o inesperada,
Los dos mostramos espejos
De un idéntico reflejo,
Entre los cuales nos contemplamos
A través de unas mascaras,
En ese mismo libro que
Los dos hemos escrito,
Pero que jamás
Hemos leído…
Frágiles hojas marchitas
Que va dispersando el viento,
Dos llamas fugadas del
Inmenso árbol de la vida,
Dos cuerpos que se involucran,
Se acoplan y se enlazan,
Recompensados por el placer,
Pero castigados por él
Remordimiento,
El eterno polvo regado
De otros ayeres,
Inquietas presas cautivas
De un incierto porvenir,
En medio de esta tierra
Tan violenta y oscura,
Enfrentando nuestra realidad,
Tan Lastimosamente...
¡Breve!


MARAVILLOMBRE

Fatigado y exhausto me extravió
En un asombroso sueño,
Y me voy emprendiendo un
Irrealizable viaje.
Transito memorables pirámides
De piedra caliza en Giza,
Y me pierdo, absorto, entre sus
Múltiples galerías, pasillos y
Pasadizos.
Recorro los insignes muros de la
Noble Babilonia,
La cual engendra sublimes plantas
Y flores, y entre sus jardines me
Regodeo y en sus artesanales
Fuentes me refresco.
Admirado peregrino las esclarecidas
Murallas chinas,
Que instauran perennes bloques
Que desafían al tiempo.
Camino guiado hacia la estrella más
Luminosa que alumbra el oscuro
Cielo,
El alejandrino faro que insigne
Conserva brillante su espejo y
Limpio su fuego.
Dubitativo y sorprendido arribo
Ante una monumental figura
Distinguida,
La resplandeciente y magnificente
Escultura de Apolo,
El inigualable coloso de Rodas.
Ensimismado marcho por un
Invaluable monumento de
Mármol blanco,
El glorioso mausoleo y opulento
Sepulcro de Artemisa.
Atónito y reflexivo asisto al
Suntuoso crepúsculo de los ídolos
Y los dioses,
Al ostentoso y erudito mundo de
La Acrópolis.
Permanezco extático ante la
Presencia del gobernante del
Olimpo y señor de los cielos,
La altiva y esplendida estatua
De Zeus.
Y al despertar de pronto perplejo,
Divagando medito,
Que el hombre está en esta y todas
Las épocas,
Interviniendo,
Como el más fecundo creador
Del arte eterno.


MANZANA DE LA TENTACIÓN

Mujer, la forma mas
Absoluta de la seducción,
La carne siempre dispuesta
A la perdición,
Como una tentación continua
E imprescindible,
Tan aparentemente diáfana,
Pero decididamente lúgubre,
Tan descaradamente impoluta,
Pero desesperadamente profana,
Vas iluminando oscuros cuartos
Y acalorando frías sabanas,
Cuando eres mas que un ardor
O un arrebato,
Siendo tan a la vez tan
Compleja,
Como incomprensible,
Eres la ventana o puerta
De escape hacia todo,
Luchando siempre hasta él
Ultimo momento,
Hasta llegar a ese fatal
Instante,
Donde eres aspiración celestial
En medio de un terreno
Pantanoso.


LOS DESTERRADOS

Y a final de cuentas
Estamos solos,
Que tan solo contamos
Con nosotros mismos,
Y la soledad puede convertirse
En una cortina inexpugnable,
En un rincón impenetrable,
Porque somos hombre y mujer,
Somos amor y vida,
La misma naturaleza,
Y yo te busco siempre
Como si fueras mi espejo,
Como si acaso fueras mi mismo
Reflejo,
Intentando establecer vanamente,
Innumerables lazos que nos unan
O nos aten,
Intentando estérilmente
Reconciliarnos,
Y a final de cuentas
Partiéndonos el corazón,
Porque somos un añejo sueño roto,
Emanado de un ser superior,
Sometidos completamente a su
Designio,
Donde fuimos ambos obligados,
A vivir en un idílico edén,
Donde eras tú ya parte de mí
Misma costilla,
Pues ambos fuimos formados
Por un mismo barro,
En medio de este aire triste,
Que envolvía todas las cosas,
Para después,
Ser perversamente expulsados
De ese místico paraíso,
Y condenados a una vida terrenal
Y pecaminosa,
Donde no somos siquiera:
Ni ángeles elevados,
Ni demonios caídos,
Mientras el cielo se nos va
Cayendo a pedazos,
Rodeados de pretenciosas virtudes
Y verdaderos pecados,
Privilegiando así la búsqueda
De fugaces placeres y deleites,
Sin establecer tan claramente
Alguna línea o compromiso,
Culpándonos continuamente
El uno al otro,
Por todo o nada,
Sin que jamas nos ajusten las
Palabras,
Pues a la vez somos tan diferentes
Como distintos,
Donde cada uno va en la obtención
De su poder y su dominio,
En ocasiones desahuciando a la razón,
Y en otras tantas,
Malgastando los sentidos,
Siendo así tú y yo,
Una absurda mitad,
Dentro de un precario equilibrio,
Equivocándote tú conmigo,
Equivocándome yo contigo,
Sin definir precisamente,
Sí el pasar por todo esto,
Fuera a final de cuentas,
Una gran recompensa,
O un merecido castigo,
Al ser tan solo nosotros,
Un par de manzanas podridas,
Dentro de un rebaño perdido.



LO QUE ERES

Conviviendo aquí,
Es esta vida,
Tú eres lo propiamente
Real,
Lo único tangible y
Palpable,
La claridad del agua
Y el azul del cielo,
La suavidad de viento
Y el calor del fuego,
La creación del mundo y
El desarrollo de la naturaleza,
La desnudez del corazón
Y la existencia del alma,
La plenitud de los sentidos y
Totalidad de sentimientos,
Esa mirada fija y
Unos labios prendiendo,
Una erupción de placer en
Dos cuerpos fundidos en uno,
Un ardiente deseo y
Una húmeda pasión,
El movimiento y la fortaleza,
La que pone la cadencia
Y marca el ritmo,
Abriendo completa la tierra
Y haciendo girar al mundo,
Como una gran necesidad,
Un goce, un deleite,
Ante esta escasa realidad,
Donde solo estamos de paso,
Un espacio que se abre ante
Dos seres,
Y el tiempo que se forja entre
Ellos,
El testimonio indeleble de mí
Memoria,
La virtud de la razón,
Si, porque contigo compruebo
Y palpo mi existencia.


LLAMARADA

Y así, como siempre,
Es ella,
Habitando aquí,
Y en todas partes,
Mujer, aparición,
Realidad o sueño,
La que en mi sé
Oculta,
Pero permanece,
Si tan solo pudiera
Entrar de nuevo a
La corriente que
Fluye por tu cuerpo,
Cuerpo de carbón
Y de diamante,
El que al despertar
La noche,
Los vas despojando
De todos tus sueños,
En la triste y fría
Agonía de este lecho,
Cuando somos dos
Intensas llamas,
Que se encienden,
Se avivan
Y se apagan,
Hasta consumir
Poco a poco
Su fuego.


LIBRE CAUTIVERIO

En el frío silencioso e
Inmóvil de tu espejo,
Eres el espejo que no
Repite a nadie,
Eres el espejo que ya
Refleja otro rostro,
Donde habitas como
Un inviolable secreto,
Un elaborado misterio,
Donde tuya y mía es la
Soledad,
Es nuestro absoluto
Reflejo,
Entre el don de la
Memoria,
Y la virtud del olvido,
Ese desbocado tiempo
Inmemorial,
Con una memoria
Variable,
Donde nada queda
Pero permanece,
Como sí al único paraíso
Que aspiráramos
Estuviera de antemano
Perdido,
Donde ni tu ni yo nos
Engañamos,
Al mentirnos.


LIBRE ALBEDRIO

Lenta, muy lentamente
Caian las palabras,
Partiendo una a una
Nuestro ser,
Lastimándonos,
Alejándonos,
Inexorablemente
Fragmentándonos.
Pues nuestro amor era
Una ilusión que tarde o
Temprano,
Se nos haría pedazos,
Como una hoja arrancada
Desde la raíz.
Navegando Asi ambos entre
Solo mentiras y espejismos,
Encendiendo únicamente
Hogueras de muy corta
Duración,
Habitados vagamente por
Solo pasiones y deseos.
Tu y yo inquietando al
Sentimiento,
Pero quebrando a la razón,
Cual si fuéramos ciegamente
Hacia el precipio.
En la ansiedad de extraviarse
Por muy diversos caminos,
Aunque escondiéndonos
Invariablemente
El uno del otro.
Un idéntico espejo enterrado
En lo mas profundo de nuestro
Ser,
Reconociéndonos previamente
Condenados,
En este múltiple juego,
Del fortuito azar.


LA PALABRA

Lenta, suave, delicadamente,
Letra a letra gotea
La indescifrable palabra,
La irrepetible palabra,
Se cuelga de los acentos,
Y se aferra a los puntos y
Comillas,
Se describe, se oculta,
Se reconoce y desconoce,
Compone y recompone
Su estructura,
Tramite,
Adquiere una vibración,
Se incorpora a la lengua
Y entona,
Encuentra un sentido,
Un signo, un trazo,
Se asocia y se disocia,
Se integra y se disgrega,
A sí misma se fortalece
Y solidifica,
Flota,
Se eleva por el cielo,
Y esparce,
Te mira, te toca,
Te desea,
Se compromete consigo
Misma y contigo,
Se revela, se siente,
Se sabe,
Y es fiel a su naturaleza,
Razona,
Conforta, cobija y
Te cubre,
E inspirada y soñadora
Se recrea,
Aunque solamente sé
Refleja a través tuyo,
Y lucha incansablemente,
Hasta que se libera,
Para finalmente
Entregarse...
¡A ti¡

LA NINFA

Es bella,
Suelta y liberada,
Inocente y coqueta,
Aunque
Frágil y delicada,
Ella:
Ninfula, lolita
O niña,
Una frágil mariposa
Que va emprendiendo
Su vuelo,
Un rostro limpio y
Un cuerpo claro,
Una cálida y tibia
Piel,
Tan suave, tersa
Y lozana,
Una delicada flor
Que lentamente va
Retoñando sus pétalos,
Unas mejillas rosadas y
Una mirada transparente,
Ella:
Tan grácil, ligera y
Liviana,
Luciendo cautivadoramente
Esplendorosa,
Reflejando al espejo
Su belleza,
Acrecentando
Día a día su
Naturaleza,
Reconociendo
En sí,
Uno a uno
Sus encantos,
Percibiendo y palpando
Cada fibra de su ser,
Como una tierra recién
Descubierta,
Como un universo en
Expansión,
Inacabable, inagotable,
Interminable,
Un repentino e impaciente
Dulce fruto,
Despertando los sentidos
Y desafiando la imaginación,
Una fresca e inquietante
Manzana de la tentación,
Aun integra, virtuosa
E intacta,
Que va esparciendo
Inclemente,
Su despiadado olor,
A ministerio publico,
Aprendiendo así,
Titubeante y cautelosa,
A ser toda...
¡Una mujer!


LA FINADA

Recostada,
Con esa pálida fisonomía,
Unos ojos cerrados,
Antaño maliciosamente oscuros,
Con una expresión de dolor entre
Los labios,
Un cabello revuelto y ensortijado,
En una extinta figura,
En su eterna vigilia de noche,
Con una memoria cerrada,
Y el corazón destrozado por dentro,
En medio de un ambiente
Melancólico y frío,
Ella, en un completo vacío
Sumergiéndose,
Entre el silencio y el desconsuelo,
Que se le deslizan por dentro,
Entregada a su destino y
Marchitada por el tiempo,
Allí, tendida,
Tan Vencida y rendida,
Donde tan solo reposa
En un extraño y descuidado
Aposento,
¿Hacia donde ira su alma?
¿Hacia donde habrá partido
Su espíritu?
¿Por qué se le terminaron
De pronto sus risas y caricias?
¿Por qué termino rodeada de
Lamentos y sollozos?
Sí, ella,
La tristemente inhabitada,
Yaciendo carente de toda
Ilusión,
Tan lejana a cualquier
Azul cielo o paraíso,
Olvidada por todos tan
Angustiosamente,
Sin encontrar ella sosiego,
Pero completamente descendida,
Que ya ni siquiera su pasado
Sobrevive,
¿En donde quedaría todo su amor?
¿En donde se extraviaría su tan
Efímera belleza?
Pues hoy todas sus pasiones
Son tan solo recuerdos,
¿Alguna vez llegara alguien de nuevo
A pronunciar su lejano nombre?
Mientras tanto,
Mi finada,
Dejare intacta tu soledad,
Mientras te vas lentamente
Desvaneciendo,
Durmiendo irremediablemente,
En ese profundo sueño,
Tú, la antes viva,
Y Ahora muerta,
La Sepultada totalmente,
Por mis recuerdos.

Y que en paz
Descanses
Por siempre.

Amen.


LA DADIVA

Pues si, ya te llamare,
Tal vez mañana, no se,
Y así me digo siempre,
Ahora que el destino nos
Parte como dos mitades,
Para no pensar en ti,
Pero aun en mí pensándote,
Así, entre distracciones,
Disimulos y ensayos,
Y tú como una estatua,
Un maniquí de figura
Helada,
Como si no cubriera carne
Tu cuerpo,
En medio de una fría y
Pálida desnudez,
Tan estrecha,
Entregándome tan solo
Tu imagen,
Donde dejarte quererte
Es tu forma de quedarte,
Donde ofrecerte mis labios
Es tu forma de besarme,
Tú cercada inevitablemente
Por mis todas ansias, anhelos
Y afanes,
¿Por qué no te apagas en mí
Mente y vacías de mi corazón?
Si distancia es tu nombre,
Y ausencia tu apellido,
Tu, mi amor consumado
Y consumido por el tiempo,
Pues todo el amor que te sobra
Lo repartes cual si fuera limosna,
Sí, como un amor implacable
Que se regresa a sí mismo,
Como un recuerdo avivado,
Como un recuerdo apagado,
Que no encuentra memoria,
Ni olvido.



LA COPULA

Pues bien,
Somos tu y yo,
Hombre y mujer,
Angeles, dioses,
Criaturas, demonios,
Sí, los dos,
Eternos creadores
De la vida,
Un cuerpo, una piel,
Unos huesos y carnes,
Habitando un lugar,
Un espacio, un tiempo,
Donde yo debo
Conocer tu secreto,
Y Develar tu misterio,
Descubrir tu mundo y
Recorrer tu universo,
Descifrarte y transformarte,
Habitarte y cohabitarte,
Recorrerte y navegarte,
Convertirme en tu punto de
Equilibrio,
Para ser tu mitad y complemento,
para así darte,
Una forma y un rumbo,
Y así poner en ti
La huella más indeleble,
Reconocerte para reconocerme,
Mente a mente,
Y sexo a sexo,
E Intentar fundirte y fundarte,
Sobre ti levantarme,
Endurecerme,
Y mantenerme firme,
Como una piedra o roca,
Adentrarme por tu oscuro túnel,
Para poder llevarte la luz,
Y humedecerte,
Ser una intensa cascada,
Que fluya adentro de ti,
Desbordarme y ahogarte,
Para así introducir gozoso
Mi semilla,
Y sembrar en ti
Una nueva flor o fruto,
Estallar y explotarte,
Para en un momento
Vivir y morir contigo,
Tan solo este instante,
Poseerte y entregarme,
Sostenerme en tu sensibilidad,
Liberarme y provocarte,
Mientras
De tu sonrisa vertical
Surgen las caricias,
Y de tus labios inferiores
Nacen los deseos,
Pues solo yo
Puedo cubrir tu herida,
Debo cerrar tu herida,
La cual sangra inclemente,
Cada treinta días,
En tanto
Orgulloso e incólume,
Voy
Acelerando tus sentidos,
Y partiéndote
El corazón.


LA CONDENA

Suspendida,
Casi al borde del precipicio,
No meciéndose.
Escapándose en el aire.

Agua sin beber,
Agua que no corre,
Estancada en su mismo sitio,
Por siempre.

Cayendo,
Hacia un lugar sin fondo,
Y Encadenada,
En la mas oscura cárcel.

Corriendo,
Hacia ningún sitio fijo,
Así huyendo,
De su propio cautiverio.

Ahogándose en sus rutinas,
Asfixiándose en sus costumbres.

Hundida solo en su memoria,
Dudando aun en lo que cree.

Causante directa de sus penas,
Víctima propicia de todos sus
Caprichos y pasiones.

Y frívola,
Seguidora fiel de mansas corrientes,
Tan solo apariencia ejerce,
Al más puro estilo.

Dilapidando lo que aun no tiene,
Mostrándose siempre con una
Caricia falsa.

Sin intentar siquiera romper su
Molde,
Una ilusa esperanza nunca mas
Asimilada.

Nostálgica ella de las desvergüenzas,
Pero Juzgadora típica de la moral.

Expulsada ya del paraíso,
Intentando recordar sí alguna
Vez fue antes.

Y así
La vida misma de cada uno,
Va enfrentando su destino.

Acostumbrada
Ya a cumplir con
“Una temporada en el infierno”.

Una vida triste,
Vacía y
Superflua.


LA BELLEZA

Ella, la aparente,
Impaciente y vacilante,
Sueño, ilusión,
Fantasía y poema,
Tan anhelante y
Suspirante,
Inspiración:
Edén, cielo y
Paraíso,
Tan intensa y
Desbordante,
Atracción, tentación,
Caída y pecado,
Atrayente e inquietante,
Entregada y dominante,
Conjunto, unidad,
Mundo y universo,
Tan voluptuosa y
Desafiante,
Pasional y abrazante,
Unión:
Deseo, pasión, gozo y
Deleite,
Tan orgullosa, pretenciosa
Y altiva,
Un secreto, misterio
Y duda,
Esquiva, altanera y
Caprichosa,
Esencia:
Eternidad,
Libertad y naturaleza,
Una promesa,
Esperanza o
Espejismo.


INTENSIDAD

Aquí estas tu, aquí estoy yo,
Descubriéndonos,
Recorriéndonos,
Ocultándonos,
Reconociéndonos,
Desprendiéndonos el uno del
Otro,
Para así habitar un solo ser,
Más allá de los límites
Terrenales,
En el eterno encuentro a
Dos pieles,
Acomodando a los sentidos
Y ubicando al corazón,
Repartiéndonos por entero
La pasión,
En el vigoroso equilibrio
De las fuerzas,
Buscado partes vírgenes
En tu piel,
Para acoplarme inmediatamente
A tu centro,
Y después ahogarte con
Un cálido y tibio flujo,
Y así, tú y yo desbordándonos
Dejándonos llevar por esa ola
Sensual,
Por ese movimiento desenfrenado,
Intentando quizás llenarnos tanto
En cuerpo como en alma,
Pero entregandonos,
Alejándonos de toda realidad,
Intentando prologar aun más
Este momento preciso,
Este fugaz momento,
Tan indescriptible,
¿Es que acaso tu no ves
En cual abismo hemos caído?


INSOLUTO PASADO

Tú,
Como una memoria escurridiza,
Como un recuerdo constante,
Un imperfecto misterio,
Un secreto vacilante,
Una cicatriz que no cierra,
Una herida cortante,
Una encarnación o figura
Intuida, percibida o imaginada,
Entre una desesperada paciencia
Y una impaciente espera,
Mientras solitarios y tristes,
Nos vamos descontando
Los días, los meses y los años,
Cuando nos sentimos solos
O completamente aislados,
Interpretando un añejo papel
Que viene mucho atrás
De ti, de mí, de nosotros mismos,
Una historia que viene más allá
De todos nuestros recuerdos
Y olvidos,
Entre la dulzura de unos besos
Y la amargura de unos labios,
Como ese cuerpo que conforta
Pero esa piel que nos desahucia,
Haciendo surgir desde el fondo
De nosotros agonías, gozos y
Orgasmos,
Fuego que consume otro fuego,
Ardor que apaga otro ardor,
Dejándonos a final de cuentas
Cenizas,
Fugaces, volátiles y minúsculas
Cenizas,
Tú,
Como una permanente presencia,
Tan comprobable,
Como inexplicable,
Mi necesidad inconclusa
De amar.


ROSA INDECOROSA

No, no puedes irte, no,
Sí tú eres la rosa profunda
La espinada rosa,
Salida de aquel jardín
Maldito,
Para envenenarme el alma
Y arrancarme el corazón.
Tu, mi deshojada rosa,
Mi desnudada rosa,
Surgida repentinamente
En medio de la noche,
Luciendo Asi:
Tan frágil, bella y
Primorosa,
Que ya siento que te quiero,
Que ya siento que te amo,
Y que mi vida no seria
Completa,
Si no va unida a la tuya,
Sino estas tú conmigo
Hoy, mañana y siempre,
Tu, mi ansiosa, oscura y
Descarada rosa,
Escapada ya hace varios
Ayeres,
De algún deleitoso terreno,
Que jamas has querido
Describirme o inventarme,
Tu, mi fragante, suave y
Colorida rosa,
La plantada amorosamente
En el campo,
Pero fugada caprichosamente
Del edén,
Tu, mi voluble, atrevida y
Despiadada rosa,
Creando al mismo tiempo
Mi propia ventura y
Desventura,
Tú, como mi idílica natura,
Inigualable flor injertada,
En lo más profundo de mí
Ser,
Como una veleidosa raíz,
Como una vena inconstante,
Tu, mi inagotable fuente,
Tan cristalina y turbia
A la vez.


ILUSIÓN

Quiero pensar que existes,
Por solo un momento,
Por solo un instante,
Que adquieres un sentido
Y una forma,
Que eres mas que un solo
Anhelo,
Que no tienes que ser
Ni diáfana ni transparente,
Aunque te supongo
Decidida e imprudente,
Muchas veces tan
Suave, dulce y tierna,
Sin llegar a ser por ello
Delicada y frágil,
Esparciendo tu fragancia
Y extendiendo tu imagen,
Tu, alterándolo todo,
Transformándome
Completamente,
Irrepetible y única,
Tan expresiva como vehemente,
Cuando te visto de virtudes
Y fulgores,
Mientras te cubro de
Deleites y pasiones,
Y te imagino tan distinta
Y diferente,
No superflua ni profunda,
Que te concedes solo conmigo
Y me otorgas por entero
La libertad de crearte,
Sin que seas absoluta
Ni interminable,
Al menos si sincera,
Autentica y exacta,
Tu, como la luz de mi inspiración
Y la obscuridad de mis sentidos,
Donde hallo mi confort
Y refugio,
Que quisiera que fueras
Mucho más que una memoria,
Mucho más que un frecuente
Y recurrente sueño,
Sin habitación ni cama,
Pero tu belleza sigue siendo
Un secreto,
Y tu hermosura se ha vuelto
Todo un misterio,
Que tan solo obtienes presencia
A través de mis versos,
Como un azar que se prende
A mi pluma,
Y navega inclemente
Por la hoja en blanco,
Que para tocar tu piel
Y habitar tu cuerpo,
Tan solo yo te conozco,
Tan solo yo te recuerdo.


ALONDRA

¿Quién eres tu?
¿Quién eres?
Tu, la que llegaste
De improviso a mí
Vida.
Sí, tu, la diáfana,
Clara y transparente,
Tu, mucho más un
Cuerpo, una piel y
Un rostro.
Tu, como nueva mundo
O tierra prometida,
El sol, la luna y las
Estrellas,
Tu, la que clareas,
Fulguras, resplandeces.
Tu, como una luz,
Un rayo y relámpago,
Girando todo alrededor,
Cambiando todo mi
Destino.
Tu, un rostro besado,
Una piel acariciada,
Un cuerpo habitado,
Tu, la que brillas,
Alumbras, enciendes.
Tu, que me aclaras,
Que me tienes ya en él
Aire,
Completando un solo
Corazón, espíritu y
Alma.
Tu, que me inspiras,
Me guías y orientas,
Tu, la que irradias,
Destellas y deslumbras.
Tu, mi primera luz
Del día,
Mi madrugada
Perfecta,
Mi única alba.


IDILIO

Buscaba desesperadamente
Aferrarme a ti, Asi,
Sin importar quien eras,
En donde estabas,
Y con quien.
Yo que tan solo sentía
Que nada era mío y
Todo me era ajeno,
Como si nada tuviera
Nombre, función o
Importancia,
Y buscaba una señal
O signo en las demás.
Y de pronto apareces tu,
Tan repentinamente,
Sin precisar decirte como
Cuando, ni porque,
Y que esta vez será
Contigo como nunca
Y como siempre.
Después de andar,
Tu y yo, ambos,
Durante tanto tiempo
Perdidos,
Que quizá ahora
Tu y yo sabemos
Como palpita este
Corazón, que sé
Esconde bajo nuestro
Pecho,
Buscando Asi una dirección,
Un rumbo, un orden,
Yo que ni siquiera
Tengo idea quien
Soy,
Ni hacia donde me
Dirijo,
A veces te siento tan
Lejana y extraviada,
Disimulando inútilmente
Que todo me es indiferente,
Tan extraño y
Tan distinto,
Cuando eres tu mi
Dirección y mi
Camino, la que me
Indica el recorrido,
Y cuantos superfluos
Pretextos para llegar
A una caricia o un roce,
Tu y yo que ya no
Esperábamos nada,
A final de cuentas
Encontrando en ambos,
Todo nuestro amor perdido.


GIZA

Estoy aquí imperturbable,
Indeclinable,
Perdurando en este y todos
Los tiempos,
Observando incólume él
Inalterable pasó del tiempo,
Atentamente mirando,
Vigilándolo todo,
Custodio leal y aguerrido
De una noble pirámide,
Una figura esculpida,
Una imagen cincelada,
Mucho más que un relato,
Fábula o suceso,
Más allá de calendarios
Edades y épocas,
Por encima de la tierra,
De la hierba y estaciones,
Hijo digno de una estirpe
Poderosa,
Un ilustre personaje,
Insigne y egregio,
Sin cara ni cuerpo,
Envuelto en una mascara y
Manto sagrados,
Aguardando inamovible
En un cofre Dorado,
Un guerrero superviviente,
Descansando imperecederamente,
Cubriéndome lentamente de arena,
Meciéndome invariable en el viento,
Protegido por el sol,
La luna y las estrellas,
Y completado por doce símbolos
Celestes,
Un sobreviviente encarnado,
Reposando,
Irradiando más allá de lo material,
Emanando,
Desprendiéndome del Cuerpo,
Extendiéndome en la noche,
Derramándome por el infinito,
Como un astro brillante y
Fulgurante,
Perdurando al margen de las
Causas y eventos,
Iluminando incandescentemente,
En el firmamento Centelleando,
Consiguiendo la cima,
Alcanzando el horizonte,
Un elegido permanente,
Continuamente mudando,
Eternamente...
Transformándose.

---KEOPS--


FUGAZ DEVANEO

Estar rendido aquí,
Rememorar tu piel y
Acordarme de tu cuerpo,
Alejarme de tus piernas y
Separarme de tus manos,
Apartarme de tus ojos y
Olvidarme de tus labios,
Serenando la razón y
Aquietando los sentidos,
Sosegando esta pasión
Y relajando este deseo,
Para Asi dejarte entero
El corazón,
Y entregarte toda el alma.


FLOR SIN RETOÑO

Extraviada y arrancada del buen camino,
Quedabas triste y vacilante,
Y ante tales circunstancias,
Tan estremecida por muy continuas penas,
Llevando así una carga,
Como si fueras un anima o fantasma,
Porque tus tentaciones de antemano
Ya te había culpado por todos los delitos,
Y atormentada entre profundas angustias,
Por momentos te sentías absolutamente
Despreciada,
Entre el desajuste de tu mente y
El errar de tu corazón,
Viviendo tan solo de engaños,
Y rodeada por múltiples lagrimas,
Y todo esto por amor, por dolor,
O por una combinación de ambos,
Pues lo que se veía de ti ¿qué era?
Un hueco, un vacío o una sombra,
¿y en donde quedaron entonces,
aquellas intensas promesas,
Que jamas te hiciera nadie?
Tu, la que no soportabas los
Remordimientos,
Porque sencillamente
Los olvidabas,
¿fue para ti una pena emprender
Cualquier acción o deseo?
Anteponiendo como siempre él
Sentimiento,
En lugar de la razón,
Cuando fue que tu te convenciste
De ser solo una flor
Que debía marchitarse
Y después desaparecer,
Evaporada por el sol
Y disuelta por el viento,
Y en esa espera te quedaste
Casi deshecha y deshojada,
Tu, que cuando al fin
Saliste de la ausencia,
Resulto que ya no quería
Ninguno reencontrarte,
Renunciando así en forma definitiva
A cualquier infructuoso sueño,
Y lastimosamente comprendiendo
Que tú jamas volverías
A ser (de nuevo) amada.


FALSARIA

Eres tú vacilante,
Frente a un fugaz
Espejo,
Actuando,
Interpretando todo
Un personaje,
Disfraza de persona,
Enmascarada entre
La gente,
Encubierta entre todos
Los demás,
Una vana imagen reflejada,
Definitivamente trucada,
Reiventandote, transformándote,
Paulatinamente desfigurándote,
Alterando constantemente tú
Entorno,
Modificando paso a paso tú
Destino,
Calculando tus intrigas,
Evaluando tus pasiones,
Tu continuamente reincidiendo,
Recomenzando una nueva
Travesía, éxodo o viaje,
Caracterizándote,
Siempre fingiendo,
Engañándote,
Asumiendo tibiamente
Tú resignado y triste
Papel de mártir.


EVOCACIÓN

Mujer,
Mujer divina e
Inalcanzable,
Te pareces tanto
A un sueño,
Y como todos los
Sueños,
Te desvaneces,
Y eres inalcanzable,
Y como a todos
Los sueños,
Irremediablemente
Les llega el
Olvido,
Tu olvido,
Mi olvido,
Mientras tanto te
Derramas atrapada,
Dentro de un inmenso
Reloj de arena,
Aligerada,
Esparcida al infinito,
Recortada por el
Tiempo,
Mas allá de todas tus
Dichas y penas,
De todas tus virtudes
Y defectos,
Terminando tu camino
Como historia,
Una fugaz y efímera
Historia,
Una fugitiva memoria,
Que borrara tu fría
Imagen al espejo,
Que dejara inconcluso
Tu reflejo,
Tu, como una sombra
O vacía imagen,
Esa que tan solo dura
Capturada un instante,
Dentro de este inmenso
Mar bravío,
Que nos representa
Todo el tiempo,
Donde mi soledad es él
Unico traje que te viste,
Como una sombra que
Te cubre,
De manera permanente.


ESPERÁNDOTE...

Desesperado e inquieto, -anochece-,
Acechando por un nuevo ocaso,
Observando el lento fluir del agua,
Recorriendo por banquetas y postes,
Aguardando entre esquinas y callejones,
-Transcurriendo-, Como si me fuera llevando
El aire,
Tratando de reconocer,
De aferrarme a alguien,
Intentando delinear un ser que sé parezca a ti,
Sin tener ya la idea de cómo eres,
¿Cómo podría yo inventarte?
¿Cómo podría yo crearte?
Recrear el camino en donde halle al fin ya
Tus pasos,
Para enseguida encontrarte y habitarte,
Colocarte en un pedestal y adorarte,
Tu, tan deliciosamente imperfecta e
Irrepetible,
Tan suave y agresiva, tan tierna y salvaje,
Para luego decorarte en una fotografía
Y dibujarte en un lienzo,
Y después cincelarte y modelarte en una
Escultura,
Y de pronto romper el molde,
Y describirte y deletrearte ante la Muda y vacía
Hoja en blanco,
Ser el que pueda soltarte y liberarte,
El que esconda tu piel y oculte tu cuerpo,
Para en cada nueva noche desvirgarte,
Y sentir tu humedad y calor,
Y luego extenderte y recorrerte,
Ser el que cultiva tu flor y siembra tu fruto,
Ese que te obsequia la vida y te otorga la
Naturaleza,
Despertando tus sentidos,
Elevándote y llenándote,
Para componerte a ti, exacta,
Como la primera, la única,
La interminable,
Hasta llegar rendido al final de la jornada,
Que es apenas, -ciertamente-, un nuevo comienzo,
Y todo eso me sucede siempre,
Mientras estoy aquí, -absortó-, esperándote.


ENAMORAMIENTO

Y de pronto te quiero
Mujer,
Hermosura que de pronto
Apareces,
Súbito enamoramiento que
Me paraliza,
Arrebato amoroso que quema,
Que prende, que enciende,
Sin razonar ni medir
Consecuencias,
Como una parte invisible e
Intangible,
Como una especie de locura o
Ciega fe,
Donde eres tu tan solo la
Perfecta,
La única e irrepetible,
Y en ti me reflejo y me
Contemplo,
Y eres ya mi amor,
Mi motivo de creación y
Recreación,
Pues todo lo transformas tu,
Tú lo transformas todo,
Y en ti, mi amada,
Veo al mundo,
Y al mundo,
Veo en ti, mi amada,
Para entablar contigo un
Dialogo constante,
Un dialogo de ambos,
De los dos,
Amor que es libertad,
Espontaneidad y creación,
De sentir la necesidad de una
Misma unidad,
De un mismo complemento,
Para entregarte todo,
Donde finalmente tu y yo
Nos conocemos y reconocemos,
Para así avanzar juntos hacia
Un mismo camino, horizonte y
Paisaje,
Poniendo fin así a una búsqueda
Incesante,
Entablando así un mundo único
E inatrapable,
Dime amor:
¿Quién eras tu antes de mí?
¿Y quien era yo antes de ti?
Tan solo antes de conocernos,
Nada, ni nadie,
Absolutamente nadie.


EL TOQUE DE DIOS

Señor,
Le has dado su belleza,
Su cruel, mortal y efímera
Belleza,
La fragancia de una flor,
Que nació marchita por
Dentro,
Ella,
Ocultando sentimientos y
Despertando los sentidos,
Orgullosa de ese don,
Que afortunada,
Le fue concedido,
Algunas veces pretenciosa,
Y otras tantas desafiante,
Erotismo y sensualidad,
Un simple placer,
O tan solo sexo,
Un deseo, atracción o
Capricho,
Armonía de la naturaleza
Plena,
Como una perfecta imagen,
Carente de sustento,
Tan intensa, atrevida y
Apasionada,
Tan solo sueños de habitación
Y cama,
Una sensación de libertad
Encarcelada,
Enclaustrada en su propio
Cautiverio,
Tan contradictoria,
Voluble inconstante,
Entre todas sus simulaciones
Y apariencias,
Irremediablemente humana.


EL RETRATO

Porque nadie sabe como eres
En el lecho,
Ni que secretos guardas cuando
Duermes,
Que es lo que hay oculto debajo
De tu piel,
O que es lo que dudas mientras
Sueñas,
Cuales son tus afectos,
Tus necesidades,
En que deshaces tu amor,
Y en que malgastas tu tiempo,
En donde hallas confort,
En donde buscas reposo,
Ni saber como te enciendes,
Ni saber como te entregas,
Cuales son tus deseos,
Y el vigor de tus sentidos,
Como es que te abrigas
Cuando te envuelves,
A que hora encubres tu
Cuerpo y enmascaras
Tu rostro,
Todo lo que tu aparentes,
O disimulas,
De cómo finges al amar,
Y te engañas al quererte,
Sobre aquella deficiente
Cualidad
O aquel defecto perfecto,
De cómo tu te enfrentas al
Destino,
Y te abandonas a tu suerte,
Rodeado siempre de sueños
Rotos,
De tantos falsos sueños,
Si ya de ti no queda nada,
Ni siquiera el recuerdo,
Si en un instante cambia
Todo,
E inevitablemente,
Hoy tan solo amas...
Lo que fuiste.


EL JUEGO DEL AMOR

Yo soy la voz que te busca,
Soy la voz que te nombra,
Por todos esos días que viví y
Esas noches que soñé,
Para alcanzar junto a ti
La quietud del día y
El confort de la noche,
Como si te conociera mucho
Antes,
Mucho antes del ayer,
En cada roce, caricia y beso,
En cada nueva sensación,
Cuando caigo subyugado y
Me rindo ante tu belleza,
Y me vuelvo a perder en ti
Y me hundo hasta tus entrañas,
Encuentro mi refugio y me
Adhiero a ti completamente,
Que me reencuentro con la
Vida misma, la naturaleza,
Mientras pausadamente
Recorro tu exterior y
Reconozco tu interior,
Que es como salir de mi y
De nuevo contigo encontrarme,
Y conservo esas marcas
Imborrables sobre mi piel,
Con todo y mi errante destino,
Que cuando me alejo
Nunca me voy de ti,
Aunque me invada la nostalgia
Cuando no estás conmigo,
Pues para que quisiera los
Espejos si ya no tuvieran
Tu imagen,
Que quisiera perdurar en ti
Mas allá de la vida
Y de la muerte,
Entre las raíces profundas
Del amor,
El amor que nos lleva al juego,
Y el juego que nos envía al amor.


EL INSTANTE

Tu, mi amor sencillo
Y complicado,
Tan fugaz y breve,
Amor que va y vuelve,
Bajo otro nombre,
Otra cara, otro cuerpo,
Como llenar tu soledad,
Y de paso,
Poblarte la memoria,
Para ser así entonces,
La mirada exacta de
Tus sueños,
Cuando tomas ya la
Forma,
De un olvido o recuerdo,
Como una preocupación
De hallarte,
Pero necesidad de verte,
Con la inquietud justificada
De negarte o entregarte,
Como sí apeláramos
Siempre a la razón,
Y no al sentimiento,
Arriesgando a final de
Cuentas,
Tan solo todo por nada.


EL ETERNO RETORNO

El viento apaga la llama,
Muda hoja marchita que
Se la lleva el tiempo,
El otoño sopla por última
Vez en ti,
Cuerpo deteriorado,
Alma lucida y
Corazón cansado,
La tierra y la arena
Inevitablemente te cubren,
Y tu polvo esta a la espera
De ser esparcida por el mundo,
Corriente que ya no fluye
Y se estanca,
Angel cortes y afable
Al que le están cortando las alas,
Mientras tu pálida piel sé
Oscurece lentamente,
El fuego ya no devora más tus
Entrañas,
Se fue acabando tu vida,
Pero tu cálida luz permanece,
Te has puesto en manos de dios,
Esperanzada y resignadamente,
Y has regresado al lugar
En donde habías sido creado.

A un lugar de fe y esperanza.


EL BESO

Y hoy por fin,
Te bese en los
Labios,
Y fue ese beso,
Tan intimo y
Caluroso,
Que ahora pienso
Que no habría otro
Que fuera tan cálido
Y sensual,
Si no es que él mas
Profundo y sentido
Jamas dado,
Y sin embargo,
Fuer uno,
Tan solo uno,
Pero el que tendió
Un camino,
Para un momento
En la eternidad.

DUAL-IDAD

Súbita y repentina,
Apareces e iluminas,
Y estas ya conmigo,
Tan precisa, certera y
Exacta,
Y con tu sola presencia
Me asistes, ayudas y
Socorres,
Desplegando inclemente
Tu inapreciable belleza,
Alterando la razón e
Increpando los sentidos,
Transformándote vehemente
Este cuerpo,
Completando,
Dando forma a mi ansia,
Pasión y deseo,
Para que así tu me confortes,
Me encierres, me ocultes,
Mientras consumes a fuego
Lento,
Todo mi arrebato, delirio y
Frenesí,
Cuando muero por estar en ti,
Y como cada noche adentrarme,
Atravesarte y traspasarte,
Para perderme de nuevo
Contigo,
Dejándome así llevar en tu
Vaivén, corriente y ritmo,
Llenándolo todo tu,
Tu cubriéndolo todo,
Cuando te vas despojando
De ropas y desprendiéndote
De dudas,
Olvidando voluntariamente
Continuos pasados y preguntas,
Tu paulatinamente
Aclarando los días y
Precisando las horas,
Mientras la vida se va
Esclareciendo,
Dejando de ser tan incierta
Y vacilante,
Surgiendo así libre y espontanea,
Cuando te me vas ofreciendo
Y otorgando,
Y descarada e imprudente
Entregando,
Hasta llegar a ese rincón donde
Ya eres la infinita, la perenne y
La perpetua,
Y vas así esparciéndote y
Extendiéndote,
Tan absoluta y plena,
A través de mí mente,
Fluyendo total y entera,
Adentro de mí corazón.


DIVAGANDO

Dubitativo, divagando,
Reflexionando sobre aquella
Mujer que ya nunca será mía,
Mirando hacia al crepúsculo,
A ese cielo infinito,
Donde Eres el espejo que
Busca vanamente la forma
Que lo puebla,
Como sí invariablemente
Todas las cosas te nombraran,
En el indeclinable paso de las
Horas y los días,
Intentando descifrar nuevamente
Tu cuerpo, tu alma,
Tus inasibles formas que
Adivino,
Una cara, un cuerpo y un nombre
Que yo recuerdo y olvido,
Pues eres el amor que ya no
Pido, y sin embargo espero,
Esa palabra o nombre que
Ya no pasa por mis labios,
Intentando callar esa voz,
Ese eco, que tuyo y fue mío,
De la vida que fue y no fue,
Y lo que pude haber sido,
Mas allá de los años,
De la vida y de la muerte,
Del ser que he sido repetida
E inconstantemente,
Entre mis reminiscencias,
Pecados y olvidos,
En medio de esta memoria
Que esta llena de olvido,
Donde todo lo que he
Perdido ya es mío,
Mas allá, analizando,
Sin las luces ni las sombras,
Sin finales ni principios.


DILUVIO

Piel que se derrama,
Cuerpo que se desborda,
Ensimismado voluntariamente,
Luces, linternas, fuegos y
Estrellas,
Mientras
Los sentidos avisan,
Los sentidos presienten,
Ellos siempre recuerdan,
Ellos nunca olvidan,
Infatigable pasión
Y ardoroso deseo,
Intensa fiebre que me
Abraza,
Fértil tierra, mundo y
Universo,
Incontenible ciclón que
Avanza,
Enardecido Volcán en
Erupción,
Profundo abismo de la
Nada surgido,
Intensa majerada fútil
Que terminara conmigo,
En duelo, enfrentamiento
Y confrontación,
Como inagotable fuente
De energía,
Una incontenible chispa
Repentina,
Que habita siempre
En el interior.


DESNUDECES

Sé tú la tempestad
De mis sentidos,
Sé tú el incendio y
La llama,
¡Ansiame, cúbreme,
Viérteme y desaparéceme!
Que no quiero tener ya
Limites hasta que estés
Plenamente llena de
Pasión y vigor,
Más allá de los nombres
Lugares y momentos,
Para así compartir un
Mismo rostro y una misma
Desnudez,
Como si ambos nos reflejáramos
En un mismo espejo,
¡Anhélame, libérame, cóntenme
Y retenme!
Cuando bajo este lecho
Quedemos ambos en él
Eterno cuerpo a cuerpo,
Pues en quien mas podría yo
Mirarme, conocerme y revelarme,
Pues quiero sentir la intimidad de
Tu piel y la costumbre de tu cuerpo,
Para así en cada noche compartida
Descubrir tus esencias, talentos y
Sentidos,
Cuando tu y yo nos desatemos y
Fundamos nuestros sexos,
Por ello mujer:
Intégrame, complétame,
Recóbrame y reconcíliame
Con la naturaleza
Y el tiempo.


DESNUDA

Ella, la única,
Mi cuerpo,
Mi piel y mi carne,
Ese cuerpo que se toca
Ese cuerpo que se mira,
Piel que se palpa,
Recorre y conoce,
Conjunto, unidad y
Complemento.
Habítame de pasiones,
Enciéndeme los sentidos,
Tu, mi ardiente fuego
De cada día,
Plenitud, completud
Y vastedad.
La vida misma,
Edén, cielo y paraíso,
La luz, el fuego y
La llama,
Esperanzas y sueños,
Anhelos y suspiros.
Principio de la
Tentación o
La inspiración,
Ilusión, realidad
Y poema,
Mujer:
Libertad, eternidad
Y naturaleza,
Mi alimento
Corporal y
Espiritual,
Tu, la imprescindible,
La insustituible.


DESEO DE TI

Y cuando hacemos el amor,
Involucramos los sentidos,
Recreando nuestros cuerpos,
Adquiriendo un mismo
Aroma, sabor y colorido,
Conformando una esencia única,
Realizando él más pleno de los convivios,
En la total asociación de todos los
Espacios de la piel,
Bañándonos en nuestra propia
Desnudez,
Vaciándonos completamente
El uno al otro,
Mientras las formas y las líneas
Se pierden para formar un solo
Ser,
Y así:
Ascendiendo cielos y
Descendiendo infiernos,
Aguardando develar más
Secretos y misterios,
Manteniendo encendido el
Eterno fuego de la pasión.


DEMASIADO HUMANOS...

Somos hombre y mujer,
Las dos mitades separadas,
Las dos mitades enfrentadas,
Acoplándonos, fornicándonos,
Entregándonos,
Que lo mismo van tomados de
La mano,
Que se avientan a un precipicio,
O construyen un camino hacia él
Cielo,
Esperando amor,
Libertad, prisión y condena de
Cada uno de nosotros,
Como un amor que nos funde,
Pero al mismo tiempo nos
Desvanece,
La medida y el peso de cada uno
De nosotros,
Imagen, impresión y apariencia,
Pero antes que todo,
Jugando, utilizándonos,
Entre el arrebatamiento de la razón
Y la pasión del sentimiento,
Los dos guiados absolutamente por
Nuestros instintos,
Por nuestros sentidos,
El azar, la suerte, lo fortuito,
Un encuentro deseado, inesperado
O postergado,
En un armónico vuelo o pavoroso
Salto,
Rodeados invariablemente de tantas
Dudas y secretos,
Como una segura propiedad
Que no tiene pertenencia,
Hipotecando promesas y
Malgastando destinos,
Desperdiciando virtudes
Y coleccionando defectos,
En una mutua y evasiva
Responsabilidad,
Arruinándonos, reconfortándonos
Buscando juntos la creación
Pero obteniendo destrucción,
Apocalipsis, caos,
Como una llama que irremediable
Se consume,
Como una memoria, un perdón,
Y un olvido.


CONSUMATUN EST

Dolor de no sentirte,
Angustia de no besarte,
Tormento de no saber ni estar
En cada cosa que haces,
Malestar de no oírte decir
Un "te quiero", o "te necesito",
Un "te extraño", o "te amo",
De (tener que) guardar todas
Esas caricias y besos que ya
No puedo darte,
De no poder embriagarme en
El infinito rojo de tus labios,
Aflicción de no acariciarte,
Desconsuelo de no abrazarte,
Melancolía de no adentrarme
En el calor de tu piel y
En el color de tus ojos,
Pesar de no sentir y compartir
El intenso aire que respiras,
De solo poder conservarte en
Fugaces y esporádicos sueños,
De no escuchar tu voz repetir
De nuevo mi nombre,
Malestar de no abrazarte,
Desesperación de no verte,
De que solo seas mi pesadilla
E insomnio permanente,
De desgastar en ti mi fé y
Maltratar mi esperanza,
En medio de esta realidad que
Me tiene infaustamente atado
En este inútil amor idealizado,
Y entretanto me tejo una sabana
Deshecha entre todos tus recuerdos,
Debatiéndome infructuosamente,
Entre la posibilidad de lo imposible,
Y la probabilidad de lo improbable.
-Amén-.


CONGOJA

Es una pena que no estés
Conmigo,
Que no estés aquí,
Que estés tan lejana,
En cada palabra,
En cada silencio,
En cada acto,
Y que cada noche obtenga
Un nombre, un rostro y
Un cuerpo distinto,
Que lamentablemente
Estés con otro,
Si, aquel, el mismo
El de siempre,
Que toda haya sido una
Sutil ilusión o un sueño
Equivocado,
Que cuando voltee no
Pueda tenerte a mi lado,
Mientras el maquillaje
Oculte tu risa,
Y los espejos no te contraríen,
Y así disfraces el cuerpo y
Enmascares la cara,
Que no te posea un momento,
Que no te detenga un instante,
Que solo te imagine o té
Suponga,
Que trate solo de adivinarte,
Es una pena que no estés
Conmigo,
Que no estés aquí,
Que estés tan lejana,
Y que el destino tenga esa
Forma absurda de jugar
Con nosotros,
Que parezcas ser solo una
Pasión o capricho,
Para que termines siendo
A final de cuentas tan solo
Una fotografía borrosa o
Un recuerdo apagado.


COM-PARTIDOS

Y prorrogar contigo este momento,
Y prolongar contigo este instante,
Donde entonces yo nazco y tu
Surges,
Y pretender alargar los minutos,
Ganándoselos a los segundos,
Como así mismo las horas al
Tiempo,
Y expandir mi piel sobre tu
Piel,
Y extender mi cuerpo sobre
Tu cuerpo,
Motivarte y estimularte,
Y durar imperecederamente
Sobre este confort y lecho,
Para intentar ser ambos
Perdurables,
Y sensibilizarnos el uno al
Otro en ese punto exacto,
Para de pronto contenerte,
Y dilatar así nuestra
Agonía,
Nuestra pequeña muerte,
Reunidos paralelamente
En una misma erupción,
En una misma explosión,
Y disponer indescriptiblemente
De ti,
Y renacer así, eternos,
Entre nuestras propias cenizas
Y huesos,
En medio de un destello
Fugaz, repentino y breve,
Para protagonizar así una
Inmortal historia,
En un espacio perenne y
Perpetuo tiempo,
Llenándonos ambos en
Plena reunión de mentes
Y sexos,
Y entre unas cuantas
Palabras agruparnos,
Conjugarnos y asociarnos,
cuando menos hoy,
Mañana y siempre,
Para a final de cuentas
Congraciarnos,
Con nuestra propia
Naturaleza,
Consumiéndonos así,
Indefinidamente,
Y por ende
Enfrentarnos.
Liberándome,
Liberándote.

CASI EL PARAISO

Rostro entre la multitud
Tantas veces buscado,
Pero no encontrado,
Rostro quizá ignorado,
Ya quizá perdido,
En la búsqueda perpetua
Del otro, del contrario,
Del mismo,
Rostro diferente,
Rostro distinto,
Espontanea unión deliberada,
Entre el azar y lo fortuito,
Como una casualidad obrando,
Conjuntando nuestros elementos
Físicos y químicos,
Involucrando irremediablemente
Los sentidos,
Entregando inevitablemente
El corazón, y el alma,
Despertando una esperanza
Y manteniendo una ilusión,
Una cuestión de tiempo que nos
Depara el destino,
Como una divina chispa que
Flota por el aire,
Que nos une o nos separa,
Que nos hunde o nos rescata,
Que altera nuestra realidad
Y confunde a nuestra existencia,
Entrando así a un mundo oculto,
Tentador e inquietante,
Anhelando poder conocer todas
Tus extrañas formas,
Tú, como una región vasta,
Extensa e inexplorada,
Una piel desconocida,
Cubierta de valles y montes,
De cuevas y cañadas,
En comunión, armonía y
Equilibrio con la naturaleza,
Donde adquieres ya la forma,
La curva, la línea, el trazo,
Transformada en una musa,
En arte, e inspiración,
Para después convertirte en
Lluvia,
Un ciclón, tormenta, y marejada,
El alimento de mi cuerpo y
Complemento de mi alma,
Mas allá de todo limite y
Frontera,
Donde tu mano simplemente
Escribe:
“desde ahora soy tu mitad,
Tu medida, tu complemento”.


BREVEDAD

Admiro como se refleja lentamente
La luz sobre tu piel,
Admiro como se desliza suavemente
El agua alrededor de tu cuerpo,
Mientras el tirano tiempo se nos va
Escurriendo como arena entre las
Manos,
Mientras el cegado amor se nos va
Diluyendo como aire entre los
Dedos,
Mujer,
permíteme ser en ti,
Tan solo
Este momento.


BANAL PRETENSION

Pretendo separarme de ti,
Y olvidar todo lo que yo
Contigo he vivido,
Para enterrarte así
Definitivamente en
El pasado.
Intento distanciarme de ti,
Indescriptiblemente
Desaparecerte,
Y renunciar a todos tus
Besos, caricias y palabras.
Procuro alejarme de ti,
Desconocerte,
Volverte una extraña y
Desenamorarme,
Desprenderme de tu piel
Y tus sentidos.
Ansío apartarme de ti,
Y abandonar indiscutiblemente
Tu frío lecho,
Y sentenciar en torno tuyo
Cualquier recuerdo.
Y así entonces,
Mientras ansío, intento,
Procuro y pretendo,
Lo único que hago es
Transformarte.
Trasncribirte en una hoja de
Papel,
Para enseguida arrugarte,
Romperte y quemarte.
Para renacer así de tus
Cenizas y purificarte,
Como si nada de esto
Hubiera sucedido,
Y regresar contigo
Nuevamente.


ATRAVESANDO DEL TUNEL AL PUENTE

No, definitivamente
Nada de lo que tenemos,
Obtenemos o encontramos,
Nos satisface completamente
O nos es realmente suficiente,
No nos llena, ni abunda,
Tan solo nos dura unos momentos,
Nos dura unos instantes,
Y luego, irremediablemente
Se nos va,
Nos deja inevitablemente,
Se pierde y abandona para
Siempre,
Pues tan solo esta de paso,
Y es absolutamente transitorio,
Asi como el destino de esta vida,
Que ni siquiera a nosotros mismos
Pertenece,
Siendo tan solo un breve y fugaz
Espacio de tiempo,
A la espera de un designio o suerte,
En donde somos las víctimas
Propiciatorias de un antiguo
Ritual de sacrificio,
Ese que desde el mismo momento
De nuestro nacimiento nos ofrece
Nuestra parte más leal y sincera
De la naturaleza,
La siempre puntual y certera
Muerte.


AQUEL ULTIMO RECUERDO

Pero vida, que más puedo ofrecerte,
Sí acaso una queja o algún dolor,
Pues en que equidistante
Tierra o cielo,
Te encontraras ya en este momento,
Yo que con lagrima a lagrima,
Voy delineando de nuevo tu cuerpo,
Tu, la que viniste,
Me amaste y me dejaste,
Que primero me llenaste,
Y enseguida me vaciaste,
Haciendo tan larga y desesperante
Tu ausencia,
Dejándome solo un cuerpo
Incompleto,
Y un corazón mutilado,
Puesto que solo seré un nombre,
Que tu boca no volverá a pronunciar,
En que otros brazos, mujer,
Al fin apareciste, prendiste,
Y te consumiste.
¿Con quien?


ANNABEL LEE

Cae ya la noche,
Y apareces tu
Descendida,
Recién enviada
O caída,
Llegando ante mí
En una forma
Misteriosa e inesperada,
Ofreciéndome entre
Divertida y atrevida,
Un delirante y osado
Trato,
Donde incondicionalmente
Te me otorgas y concedes,
Entregándote tu decidida,
Ante cada uno de mis
Arrebatos,
Pidiéndome incondicionalmente
Que tu seas para mí
La única mujer,
Indiscutida y admirada,
Una obscura diosa maldecida,
Idolatrada o reverenciada,
La que cure y me conforte
Todos mis múltiples males,
Cediendo solo para ti
La razón, el corazón
Y el alma,
Para Asi
Postrarme ante tu belleza y
Arrodillarme ante tu hermosura,
Y tu tan sombría,
Tenebrosa y lúgubre,
Pidiéndome muy expresiva,
Que me aísle,
Que me aparte,
Que me aleje,
Distanciándome invariablemente
De todo lo material y divino,
Sin dudar, ni vacilar,
Instintivamente,
Y enseguida
Acoplarme a tu piel y
Ceñirme a tu cuerpo,
Y te muestres decididamente
Absoluta, plena e ilimitada,
Encerrandome y ocultándome
En tu mortal y frío cautiverio,
Asi protegiéndome de la luz y
Amparándome del cielo,
Y por ti emigrar,
Traspasar el edén y
Atravesar el paraíso,
Para así rendirme ante ti,
Quebrantando mi fe y
Doblegando mi esperanza,
Mi virgen malévola,
Maligna y maliciosa.


ANGEL EXTERMINADOR

Angel de la vida
Que me conduces
A la muerte,
El sol y la luna,
El día y la noche,
Que habitan
En mi corazón.

Tú, la dócil y la altiva,
Mi cariño y mi dolor,
Desolación y paisaje,
Enmarcados por mí
Piel.

La tristeza y la alegría,
Mi razón y mi locura,
La Frialdad y el calor.
Tan apasionada e insensible,
Una Esperanza y desazón,
Eres dulce como amarga,
Generosa despilfarradora
Del amor.

Pecadora e inocente
En cada uno de tus actos,
Tan Veraz y mentirosa,
Cuando te presentas u ocultas
De mí.
Como Cielo e infierno míos,
Donde Tan solo goces y
Castigos Hallo contigo,
Tú, como un logro y una
Frustración.

Una victoria o derrota,
Certeza y confusión,
Como una verdad y una
Mentira,
Un orgullo y vergüenza
Diaria,
Me devoras lentamente
Para Engrendarte en mí.

Eres mi puerto y mi deriva,
La tocable y la desvanecida,
Como lugar o un camino
Sin retorno,
Un olvido y un recuerdo,
Perpetuandose,
Eres mi unión y división
Evitándome y asediándote
Siempre.

Tú, La misma, la distinta,
Y Diferente,
Tan áspera como suave,
Tan imprecisa como certera,
La ternura y la pasión son
Conjugan en ti,
Cuando me limitas o enajenas.

Tu, tan mía, pero a la vez de
Todos
Me asciendes y desciendes
A tu antojo,
Tan la virginalmente penetrada
Por otros, varios, y por mí,
Tan solo sexo disfrutable,
Empero, haciéndome el amor.


AMOR, ARTE Y BELELZA

Si es el amor raíz y origen,
Entonces tiene finalidad y
Tiene destino.
¿Y como amar entonces?
En concordancia con la
Naturaleza,
Y en libertad con los sentidos.
Y sí el arte del amar,
Es hacerse amar,
Debo incendiar tu piel y
Convencer tu cuerpo.
Pues si no, muere ese amor
Y otro mas lo sustituye,
Asi no dejando nada que nos
Remita al pasado.
Aunque la hermosura posea
El poder suficiente para
Suplir al arte,
Y que es el arte,
Si este no se encuentra
Rodeado de belleza,
Y que seria de la belleza,
Si esta no pudiera trasmitirse
Por medio del arte.
Y es tan infructuosa la
Belleza que carece de testigos,
Pues solamente se desea aquello
Que ya ha sido previamente visto,
Aquel objeto amoroso que pueda
Palparse a primera mano.
Porque así con el deleite sé
Consigue la paz,
Se complementa la pasión,
Y se comparten los sentidos.


AMOR IN-CONSTANTE

EL INICIO:

Es el amor el puente
Que invariable
Une ya a dos seres,
Cuando al fin apareciste
Tú,
Obrando una casualidad,
Un inesperado azar,
O un evento fortuito,
Como esa fuerza
Impredecible
Del destino,
Y si contigo
Llegaba la dicha,
¿Serias mía para siempre?
Llenándome así,
Del tú y del yo,
Entonces,
Como una inevitable
Esencia,
De todo dialogo amoroso,
Embelesado y extasiado
En el pleno goce del amor,
Con frenesí, emoción y
Entusiasmo,
Pero muy poca razón,
Inevitablemente deseando:
Nacer contigo cada día, y
Morir contigo cada noche,
Pues este vivir
Ya no era mío
Si no tuyo,
E inclusive nuestro,
Que ante tu desnudo
Sincero e inapelable,
Ya no tenía palabras,
Ya no tenía sentidos,
Pues tú eras
El otro ser
Que habitaba
Dentro de mí,
En tanto yo
Queriendo
Dedicártelo
Todo a ti,
Tan solo a ti.

CONCLUSION:

Eras tú pretendiendo
Ser real,
Disfrazada, aparentando,
Tan solo posando,
Fingiendo un genuino
Interés,
Importando poco lo que
Hiciera,
Y yo dejándome
Arrastrar por ti,
Que mientras yo te estaba
Contemplando,
¿Cuál era tu razón de amor,
Para vivir?
Porque yo podía entrar
En tu cuerpo,
Pero nunca a tu alma,
O a tu corazón,
Tu, tan repentinamente
Igual,
Como otras tantas distinta,
¿Cuál era tu esencia entonces?
Cuando yo lo que buscaba,
Era completarme afanosamente
En tu vacío,
Como ese juego del quererte
Al amarte,
Permitiendo así que todas mis
Esperanzas emprendieran
Fugaces su vuelo,
Y tú, mi amor inconstante,
Que apareció y se fue
De pronto,
Tan de improviso.


AMOR DESCARNADO

PROLOGO:

Y es el amor el encuentro
Idealizado de dos fantasías
O fatal es el encuentro de dos
Realidades,
Es el encuentro de dos cautiverios,
O es el encuentro de dos libertades,
No, el encuentro de dos soledades.
Un placer o un tormento que al fin
Y Al cabo, se paga a sí mismo.

PRIMER ACTO:

Tu, mi principio y mi fin,
Mi amor tangible e imaginario,
La luz de mi cuerpo
Pero obscuridad de mi alma,
Quisiera anochecer en tu piel
Y amanecer en tu espíritu,
Para ser esa pasión que de deje
Sin aliento.

SEGUNDO ACTO:

Vivo por lo que tu me das,
Y muero por lo que ya no tengo,
A ti que de debo tanto,
Ya no quisiera pagarte nada,
Pues lo único que conozco de ti,
Es tan solo una parte,
Apenas una mínima parte.
Tu, mi amor incondicional y
Condicionado,
Mi amor lastimero y lastimado,
A veces me duele tanto que
Sigas creyendo en mi.

EPILOGO:

Como podría explicarte,
Lo que no debe explicarse,
Tu que no me buscabas,
Y yo que tampoco te evitaba,
Como si obraran los deseos y
Las pasiones en una misma
Dirección,
Yo deseando una primera noche,
Y tu añorando una ultima.
¿Oh acaso yo creía que nuestro amor
Duraría para toda la vida?


AMAR Y QUERER

Amor,
Sentimiento indescriptible
Que se experimenta entre
Nosotros,
De un modo tan parecido
Y distinto.

Donde nunca es lo mismo
Para el que quiere y el que
Ama.

Porque querer puede
Intentarse en cualquier
Momento,
Pero amar
Hay que hacerlo
Siempre a tiempo.

Cuando amas
Tienes tiempo para
Todo,
Cuando quieres
Buscas tan solo
El instante preciso.

Cuando amas repartes
Amor,
Cuando quieres
Solo repartes el mismo.

Cuando quieres té
Reconoces,
Cuando amas eres
Tu (ya) mismo.

Querer puede ser solo
Una pasión o capricho,
Y amar deber ser (como)
Una vocación y servicio.

Si querer es soñar,
Amar es realizarse,
Si querer es inventar,
Amar es recrearse.

Y Si querer es abrazarse,
Pues Amar es estrecharse.

Y yo te quiero porque lo
Siento,
Pero más te amo porque té
Necesito.

Porque si querer es mejorar,
El amar es esforzarse,
Pues querer es entender,
Pero amar es atenderse.

Y si querer es complacer,
El amar es entregarse,
Porque querer es cuidar
Las formas,
Pero amar es desbordarse.

Porque el querer nos conforta,
Pero el amar nos satisface,
Porque al amar te entregas en
El aire,
Pero al amar te avientas al
Abismo.

Y querer es como tocar el
Cielo.
Pero amar es llegar hacia lo
(Mas) Profundo.

Y que te quieran es tan solo
Contar con suerte,
Pero que te amen es en sí
Llevarse toda la fortuna.

Cuando amas ya no existe
Nadie más,
Y Cuando quieres el amor
Puede tomar por caminos
Distintos.

Y en ocasiones el amor
Puede ser una frágil y
Fugaz caricia,
Que a final de cuentas
Se nos resbala
Irremediablemente
De las manos.

Que lo único real de este
Momento preciso,
Es que tu tan solo
Me quieres,
Mientras yo
Tan solo te amo.


ALGUIEN...

Afuera hay alguien
Que no me conoce,
Alguien que no me
Espera,
Alguien a quien no
Le importo,
Alguien a quien no
Le hago falta.
Afuera una habitación
No me encuentra,
Y una cama no me
Reúne,
Una mujer no me
Conforta,
Una mujer no me
Descubre,
Mientras lentamente
Este lecho se enfría,
Alguien no se acuerda
De mi nombre,
Ni de mi fisonomía,
Un espejo no refleja
Mi imagen,
Y un cuerpo no me
Recibe,
Y una piel no me
Acoge.
Afuera alguien me
Esta perdiendo,
Alguien sin mí
Esta viviendo,
Alguien siempre me
Evita,
Alguien nunca me
Halla,
Alguien que siempre
Me olvida.
Alguien que no me
Recuerda,
Mientras tanto
unas manos no
Me recorren,
Y unos labios no me
Acarician,
Afuera hay alguien
Que no se entera
De mí,
No se entera de
Que existo,
Y ojalá ese alguien
Pudieras ser tu,
Quien esta leyendo
(Todo) esto.
Alguien como tu...
Alguien...


AL POETA

Triste es la misión del
Poeta solitario,
Al cantarle sus poemas
Al amor,
Pensando solo en su
Desamor.
Pues no hay un corazón
Que no lo cubra de penas,
Y no le seque lentamente
El néctar de su amor.
Sin recobrar ya la
Fe perdida,
Sus propias musas le
Persiguen y corroen
Su corazón,
Buscando entonces
Esconderse entre las
Sombras de la creación,
Mientras tristezas le van
Deparando la vida,
Al haber tomado la
Poesía,
Y perdido la Razón...


ABANDONO

Despojado de tus ojos y
Arrancado de tus manos,
Soy una extraviada fecha
De un borroso calendario,
Como si tuviera ya sellado
El sexo,
Y el cuerpo clausurado,
Mientras la razón se confunde
Y el sentimiento se dispersa,
Porque duele tanto la piel,
Y pesa mucho el recuerdo,
Porque se siente tan duro el día,
Y tan áspera la noche,
Si, al sentirme desprendido
Y saberme desahuciado,
Tan lejano e ignorado,
Cuando una herida me
Recorre y me corta,
Y al corazón lo cubre
Repentinamente todo ese
Olvido,
Para ser ya tan solo
Una historia,
Un pasado,
Un recuerdo,
un amor Fugaz,
Pasajero y herrante.


A DOS PIELES

Con mi mano voy dibujando
Tu cuerpo,
Cierro los ojos e imagino así
Tu boca entreabierta,
Y es así como yo te comienzo
Y te deshago,
Dulce carne mi mujer,
La cual me vuelve a
Estremecer,
Cuando nos envolvemos,
Apretamos y ahogamos,
Inventado y recreando
La pasión y el deseo,
Siendo los dos cuerpos
Profundo que se habitan
Al estar desnudos,
Provocando y avivando
Un incendio durante
Toda la noche,
Donde nuestros labios sé
Buscan entre las múltiples
Joyas que poseemos,
En este irrepetible instante
Dado entre tus muslos,
Donde mi tempestad
Intensa fluye por un
Hondo canal,
En tibia y húmeda
Explosión de un éxtasis
Que nos desborda intensos
Hacia la vida misma.


A CINCO SENTIDOS

Cuando mis dedos caen de
Nuevo sobre tu cuerpo,
Cuando me pierdo en tu
Eterna gruta del triángulo
Sagrado,
Y me hundo y beso allí tus
Labios húmedos y aterciopelados,
Si, cuando avanzo y cubro por
Todo tu oscuro túnel,
Esta ya tu piel,
La cual cede gozosa entre mis
Manos,
Ahí, entre la suavidad y tibieza
De tus pechos liberados,
Donde sobresalen dos delicadas
Y olorosas flores,
Esos dos botones que me saben a
Comunión y frescura,
Dime, ¿qué me aguarda en el calor
Y confort de tu misterioso vientre?
Entre tus muslos que me atrapan y
Me llevan en armonioso vértigo,
Donde nuestra carne expresa la
Llegada del ardor y del deseo,
Mientras yo me vuelco y me
Derramo en ti,
Pues tu desnudez me ofrece la mas
Completa libertad y entrega,
La más deliciosa y placentera,
¡Ven y tenme ya, que esperas!
Que hay que amar a tiempo,
Y darse tiempo para amar,
Y tener así en uno y otro mismo
El suficiente amor para hacer.

No hay comentarios: